¡Hola a todos, muy buenas noches! (Qué
oscuro está ya el mundo, dios mío!)
Hace algunos días terminé "Play"
de Javier Ruescas y tenía ganas de contaros qué me había parecido y las
sensaciones que tuve al leerlo.
“Nadie diría que Leo y Aarón son
hermanos. El primero es presumido y ambicioso; el segundo, tímido y reservado.
Pero ambos desean algo. Mientras Leo sueña con hacerse famoso a toda costa,
Aarón no deja de pensar en cómo puede recuperar a su novia, quien, tras ganar
un concurso y convertirse en una estrella mundial, se ha vuelto inaccesible.
Un día, husmeando en el ordenador de su
hermano, Leo descubre que Aarón tiene un talento desbordante para la música, y
que ha compuesto y grabado varios temas que no tienen nada que envidiarles a
los hits más populares del momento. Sin meditar las consecuencias, Leo decide
darlos a conocer por internet y muy pronto el fenómeno Play Serafin –el nombre que le ha puesto al canal de YouTube–
estalla por toda la red…”
No era el primer libro que leía de este
autor, así que fui con unas perspectivas bastante altas porque "Tempus
fugit" me había gustado bastante, bastante mucho, la verdad. Creo que hace
tiempo comenté que lo había leído, que me había gustado y que me había
sorprendido muy gratamente y bla bla bla. Es verdad, fue así. Pero no ocurrió
lo mismo con "Play".
No me malinterpretéis, es una historia
entretenida y con muchas referencias frikis (una de las cosas con las que más
disfruté, sin duda), pero algo falló.
Aún no sé exactamente qué pudo ser, pero
estoy bastante convencida de que los principales culpables fueron el uso de la
primera persona (aunque en ocasiones muy bien llevada al ser un capítulo desde
los ojos de Aarón y otro desde la perspectiva de Leo) y el haber decidido crear
una historia del género realista.
No me metí en la historia, no me creí a los
personajes y no los sentí salir de las páginas como me ocurrió con Hanna o
Pablo de “Tempus fugit”.
La trama de "Tempus fugit" me
pareció que trataba un tema interesante, como el de la evolución social y en
qué podemos llegar a convertirnos si seguimos por el camino que llevamos de
destrucción y contaminación (a nivel de conjunto, me refiero xD)
En cambio, "Play" tiene una
trama, una base que ya no me atraía desde un principio: la fama. Es que a mí la
fama... a ver, es verdad que también es un tema interesante, el lado oscuro del
éxito, y todas esas cosas. Pero yo no sé si fueron los personajes, que no
consiguieron llegar a mí, o la narración en primera persona.
Todavía no sé qué pensar de Leo. Sé que es
un personaje que requería un lado egocéntrico y turbio porque el autor no
quería presentarnos a un chico perfecto, pero aún así no acabó de gustarme. Se
preocupaba demasiado por su aspecto, por su éxito y yo no llego a entender cómo
es que nunca se planteó por sí mismo dejar de aprovecharse de su hermano.
Aarón es un pringadillo donde los haya. Me
cayó bien pero el final es un poco... raro, no sé, no me tuvo mucha conexidad
con todo lo que les había llevado a Nueva York, todo el asunto de Emma fue muy
extraño también. De repente, me topé con situaciones que el autor no había
preparado anteriormente y que resultaron como muy forzadas: la subida al
escenario de Aarón al final del libro o lo que finalmente ocurre con Dalila,
por ejemplo. Por no hablar de lo de Castorfa, con la de nombres que se pueden
inventar...
Uno de los mejores detalles, sin duda, como
ya otros comentaban en muchas reseñas, es la bola 8, Tonya. Pertenece a Leo y
es uno de estos cachivaches a los que les haces preguntas y responden cosas
como "mis fuentes dicen no", "te lo aseguro" o
"pregúntame más tarde". Eso me pareció muy original y un pincelada
muy buena.
Otra de las cosas que me gustó muchísimo
fue la continua referencia a la canción “Hey there, Delilah” la cual adoro.
Luego, el resto, lo que por así decirlo
sería la chicha del libro me dejó un poco indiferente; no sentí esos
escalofríos que me sobrevinieron a veces en “Tempus fugit” y eché de menos más
acción, más frases memorables y personajes más complicados.
Leo y Aarón (y Tonya, la bola 8) |
Aunque el género de "la vida
cotidiana" parece muy sencillo, yo pienso que es uno de los géneros más
complicados que existen porque está muy presente el peligro de caer en la
rutina, en contar cosas demasiado normales, sin interés. A pesar de que la
historia de Aarón y de Leo no tiene nada de normal (se hacen mundialmente
famosos), no llegó a impresionarme.
Eso sí, si vuelvo a toparme con un libro de
Ruescas que no sea de temática adolescente/actual, no le haré ascos para nada
:)
Gracias por leerme, ¡un saludín!